martes, 24 de julio de 2012

IMITADORES


Desde principios del siglo XX, los argentinos luchamos por una filosofía de vida acorde a lo que aprendimos en la historia de la humanidad, copiando y probando lo que mejor sea para la nación en su conjunto.
Somos grandes imitadores de lo extranjero, teniendo la capacidad y fortaleza para construir un pensamiento nuevo, basado en lo que somos y en cómo somos.
Por aquellos años las ideas traídas de Europa que entraban por el puerto de Buenos Aires eran lo último en tecnología, algunas eran amoldables a nuestra idiosincrasia, otras no tanto y otras para nada.
El término de la guerra fría y caída del comunismo, decidió un mundo sin fronteras políticas pero con fronteras económicas y hablando en distintos idiomas, es como pactar con desconocidos, aumentando la brecha entre las pautas culturales.
Quisimos parecernos a los Estados Unidos con la ley de convertibilidad, como si una ley nos fuera a cambiar la mentalidad ingenua, por momentos; y aprovechando la era fuimos ricos inconformistas con el “deme dos” en el extranjero, dando vueltas en camionetas último modelo, sin pensar en nada ni en nadie. Éramos ricos por ley, hecho y derecho.
Cuando nos dimos cuenta que el mundo era otra cosa, algunos se rascaron la cabeza y sosteniendo algunos pocos pelos decidieron brutos cambios, sosteniendo que los cambios paulatinos no servían fuimos tres veces pobres y los que depositaron dólares, recibirán dólares y los que depositaron pesos, recibirán pesos; cubriendo así, la fabulosa mentira en ley.
En diez años sin ley, se copiaron formas, arrebatos, palabras y menesteres que ya no venían de Europa; nos libramos del papá, que conformaban la figura de Bush, pagando parte de la deuda al FMI y con eso, ya somos libres de ideas para poder manejar nuestras mentes a los antojos del que manda.
Al carecer de ideas propias, buscamos un líder más cercano, al norte del Mercosur, vive el ogro que nos instruye, el que tiene la plata para abastecernos a cambio de meter a la fuerza su concepción ideológica, una idea de otros para un pueblo pacífico.
La idea consiste en aplastar la intelectualidad sureña y manejarse con unos pocos que mandan; mentir, destruir e invadir el cerebro de los futuros pensantes; callar a los que piensan y dicen, destruyendo el consenso y aplicando del fanatismo mediante el populismo de masas pagas, con unas pocas monedas fabricadas sin respaldo.
Los gobernantes de los países de Latinoamérica tratan a sus gobernados como si fueran focas en un circo, entregándole una anchoa luego de cada pirueta.
Éste plan, sistematizado, ideado y no escrito que en Argentina se llama Modelo Nacional y Popular, no es otra cosa que un lavado cerebral sistematizado que se utilizó en la Rusia de 1920; en la Alemania de 1934 y depende de las personalidades dictatoriales, de la autocracia y del pueblo convencido y no pensante.
Los autócratas dependen de la masa y la simbiosis se paga con plata sin respaldo y en el peor de los casos, con dinero mal habido de las drogas y la trata de personas. A las masas no les importa de donde venga, como así no les importa que los controlen, a cambio de migajas que al otro día no vale absolutamente nada.
Éste plan, modelo o como quiera llamárselo, es un plan pensado y no escrito hoy, pero me recuerda a la obra de Adolf Hitler, “Mi lucha”.
Pintado así, parece que estamos en un grave problema; pero como soy un ser resiliente y no pretendo que todo el mundo lo sea, veo las situaciones de manera más positivista.
Para que un régimen autócrata caiga, lo que hay que hacer es dejarlo hacer, soportando y tolerando lo que el gobierno no puede pensar. Buscará ayuda externa, lo sabemos y dependemos de masas extranjeras para sobrevivir en el mundo globalizado; respiremos hondo, hagamos familia, trabajemos como si alcanzara el dinero para llegar a fin de mes.
Los tiempos cambiarán, el próximo gobernante será de transición y tendrá el deber de reprogramar a la sociedad para que sea sana y no dependa de masas, sino de cerebros.

José Luis Senlle
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viernes, 13 de julio de 2012

MORDAZA


Y si, así lo vivimos; éstos son los mecanismos psicopáticos de la dictadura nacional socialista, que en lugar de hacerles la guerra a los países hermanos se las hace a los propios integrantes de un pueblo manso, quieto y tranquilo.

Los que tenemos la oportunidad de hablar y decir lo que pensamos, somos perseguidos mediante la Gestapo económica, mintiendo y desbaratando la moral de una nación.

Si se habla diciendo lo que está pasando en el territorio, directamente colocan la mordaza económico fiscal; lo hicieron con papel prensa, una absurda ley de medios y ahora con los operadores inmobiliarios.

Los fanáticos son unos pocos individuos que sobreviven de las arcas del estado, fanáticos por conveniencia, para la destrucción. Se dicen peronistas pero nunca entendieron las políticas de aquel peronismo, ni tampoco entienden las políticas globales, nunca leyeron y si leyeron no pasaron de Marx y Hegel.

Eso de luchar para la liberación, ¿liberación de que o de quienes?

Nunca un modelo nacional y popular luchó por la liberación de nada ni de nadie, los fanáticos se comen un verso y luchan por él como si fuera la verdad revelada y son tan ciegos que no se dan cuenta que se pusieron un cepo en el cerebro.

Los que hablamos somos investigados, si no encuentran lo que ellos quieren, inventan y difaman; eso no es política, ni alta, ni baja y no llega a ser política sucia; para que sea política sucia faltan fundamentos desde todos los ángulos.

Y ya que no tienen fundamentos, entonces se enardece y se divide a la sociedad con discursitos estúpidos, banales y lógicamente sin refuerzos políticos ni ideológicos.

Pase y vean, señores feudales, no poseo nada que les corresponda, ustedes son pobres de espíritu y el alma carcomida por la ambición del no poder ser.

Se aprovechan y pisotean al pueblo porque del seno de la oposición no existen cabezas que piensen pero se olvidan que el propio pueblo forma una oposición culta, recta, que habla sin tapujos y los que no le debemos nada a éste miserable gobierno de la señora Cristina Fernández viuda del padre de la destrucción espiritual de la Argentina, no nos callaremos por más que manden a la afip, Gestapo o como corno se llame en el futuro.

Si ustedes van por todo, sepan que hay una sociedad cabal para resistir lo que manden. Sigan hablando por cadena nacional y diciendo mentiras, el pueblo está despertando.

José Luis Senlle

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lunes, 9 de julio de 2012

DESASTRE HICIERON


Habiendo llegado a ésta altura del juego, todos nos damos cuenta de la gran mentira nacional vivida en todos estos años; nos prometieron el cambio y el cambio ocurrió en contra de todos.

Cuando el presidente Néstor Kirchner le pagó la deuda del país al FMI, lo único que hizo es sacarse la institución de encima para que no lo pueda controlar, medida ampliamente aplaudida y elogiable por aquellos tiempos ya que en el Fondo Monetario Internacional no podían pensar en economía mundial y es simplemente una destructora de economías regionales. El acto de independencia económica, pensado de esa manera, era muy positivo en aquel momento; pero abrió las puertas de la corrupción interna al no tener el organismo de control internacional; parece que sin auditorias se puede hacer lo que quieren.

Un gobierno que no sea previsor, no es gobierno. Una mentira trae a otra mayor y luego para retornar a la verdad es imposible; media nación le creyó y media nación se desilusionó.

Desastre hicieron con la seguridad nacional llevando la policía fronteriza al centro del país, quitándole poder y acción a la policía federal y colocando Gendarmería, sin experiencia, a cuidar las calles; tratando a los jóvenes gendarmes como carne de cañón para enfrentar a los narcos por un magro sueldo.

Desastre hicieron con la economía nacional mintiendo en las estadísticas, falsificando datos y demostrando que la economía con la libretita de almacenero no sirve para cerrar las cuentas, haciendo ver a sus partidarios que vivimos muy bien con una inflación del 9 % cuando en realidad es mayor de 25%. Sacándole o robándoles a los trabajadores parte del sueldo como impuesto al que trabaja.

Desastre hicieron con el dinero de las AFJP y ANSES, el pueblo no sabe en que se invirtió ya que no hay informaciones claras al respecto.

Desastre hicieron con la aerolínea de bandera, alquilando aviones que se encuentran sin uso y pagando fortuna, dándonos pérdidas por más de 600 millones de dólares al estado.

Desastre hicieron con la famosa ley de medios, en contra de los monopolios privados para que pasen a ser parte de los monopolios del estado y den informaciones falsas a su favor.

Desastre hicieron con la salud en toda la República, en detrimento de las estructuras hospitalarias, haciendo que los profesionales sean míseros obreros de la salud, decayendo en sus formas profesionales y científicas.

Desastre hicieron con la educación de los niños argentinos tratando de inculcar ideologías que no corresponden a la idiosincrasia nacional, entregando aparatos de tecnología inútil mientras que nuestros hermanos del norte de nuestro país sufren hambre y desnutrición.

Desastre hicieron entregando subsidios a los punteros políticos para que repartan a su antojo y decisión; las familias pobres están sometidas a los caprichos de una junta de inservibles, ideológicamente manejados por una estructura piramidal e inamovible en sus pensamientos siendo despóticos con los pobres mientras ellos ganan fortunas y se guardan los recursos del estado en cuentas bancarias en el extranjero.

Desastre hicieron con la toma del personal estatal, formando un ejército paraestatal e infiltrándolo en todas las escalas económicas y financieras del estado, con pensamientos únicos y métodos de acción falangista, sirviendo a un solo jefe, rey o cacique.

Desastre hicieron con los planes de estudio, primarios, secundarios y universitarios con propagandas políticas en los libros al mejor modo del Tercer Reich y enseñando el pensamiento único para obedecer un sistema ya caduco.

Desastre hicieron al tratar de imponer el Cubanismo o el Venezonalismo impregnado de ideologías del siglo pasado interrumpiendo el crecimiento intelectual de los niños.

Hoy Argentina es mentira, corrupción, desolación, fanatismo, despilfarro, soberbia, inflación, desinterés, aplanamiento, chatura y mediocridad.

Y a pesar de todo ello, jamás borraran mis ganas de crecer y compartir con los que menos tienen, procurando la elevación del ser Argentino; seguiré luchando por un país mejor como lo quisieron mis maestros de antaño.

José Luis Senlle

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sábado, 23 de junio de 2012

POR LA CONDENA


El sentido de la democracia es parlamentar, dialogar y respetar. Cuando en una democracia falta una de las tres, deja de ser democracia para pasar a ser otra cosa.

La democracia es directa cuando las decisiones son adoptadas directamente por los miembros o parte de los miembros de una nación, por ejemplo los hechos ocurridos en la semana del cabildo abierto de 1810.

En la democracia indirecta o representativa, las decisiones son tomadas por los representantes reconocidos por la sociedad mediante el voto a las Cámaras de Senadores y Diputados, pues el pueblo no gobierna sino por medio de sus representantes.

En la democracia participativa los ciudadanos, con capacidad de asociarse, se organizan de tal modo que pueden ejercer influencia directa sobre las decisiones públicas mediante mecanismos plebiscitarios.

Estas tres formas no son excluyentes unas de las otras y se integran mediante mecanismos complementarios y decisiones políticas.

En Argentina se adopto un sistema Democrático Representativo, Republicano y Federal, ya se hablaba de esto en la Constitución de 1826 y cuando algunas provincias adoptaron un régimen unitario; sobrevino la guerra. Cuando falta algún componente del sistema adoptado, ya sea representativo, ya sea republicano o federal deja de ser sistema democrático adoptado.

Hay cierta confusión entre los conceptos de unitarios y federales, por escrito se adopta un sistema federal pero en la práctica, se utiliza el unitario.

En un verdadero sistema democrático los representantes del pueblo no actúan solos, escuchan a sus representados, a los votantes que lo pusieron en algunas los escaños, si ese representante no escucha a los de abajo, desviando su oído a los de arriba, llámese Poder Ejecutivo, deja de ser democracia para pasar a ser una dictadura. Es por eso, que cuando el representado, que es el pueblo, no se siente oído por su representante, pasa a gritar en la calle, formando ya una democracia directa.

Cuando el poder ejecutivo desoye las manifestaciones populares y las reprime, consolida la dictadura. Cuando un pueblo paga impuestos excesivos y no ve lo que se hace con ellos, o ve que se destinan a otros fines que no acepta, el pueblo sale a la calle en forma de protesta y reclama democracia.

Es el derecho del habitante de bien ser auditor de su gobierno y si el gobierno carece de explicaciones, el auditor debe escarmentarlo, corrigiéndolo y no esperar a las próximas elecciones, manifestemos por la condena a la antidemocracia, para que el país no caiga.

Tenemos un País, tenemos un Gobierno, pero, ¿tenemos Democracia como nuestra Constitución lo define?

José Luis Senlle

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miércoles, 20 de junio de 2012

FRANKENSTEIN.


Para manejar el poder, lo primero que hay que hacer es distribuirlo. Cuando un gobierno democrático pretende manejarlo todo deja de ser democrático para pasar a ser una dictadura.

Ocho años de dictadura dando dádivas a los pobres, en lugar de solucionar el problema, entregando poder económico a jóvenes inexpertos en estrategias y tomando a los transportes y movilización como líder y entregarle todo el poder, es un error fatal.

Imaginemos que estamos en una guerra contra un país y la defensa depende de las armas que el enemigo nos vendió.

Para crear un monstruo, lo primero que el gobernante debe tener en mente es como eliminarlo, porque sino el monstruo se come al gobernante; ésta estrategia es tan antigua como “Frankenstein” libro escrito en 1818 por Mary Shelley.

Ahora bien, cuando un gobierno es débil, tratará de no demostrar su debilidad, abriendo varios frentes tácticos y estratégicos, que si uno le sale bien y teniendo un buen aparato de propaganda, se podría vender ése logro como ganancia; otro error fatal, demostrado en la segunda guerra mundial por la dupla Hitler-Goebbels.

Cuando alguien abre varios frentes estresantes y no puede cerrar ninguno, se cae en depresión sin darse cuenta que se suicida.

Las primeras fugas en los frentes son los aspectos económicos, cuando hay corrupción y pretende mentirse con estadísticas falsas es el primer paso hacia el precipicio.

El silencio de los que saben también es un acto suicida por parte de la dictadura; si la dictadura no se abre, cae y pasa a gobernar “Frankenstein” ideando otra dictadura.

A la dictadura sindical no le queda otra cosa que luchar contra la dictadura gubernamental y parlamentaria, ya que los corruptos han infiltrado todo el “estáblishment”. Y está bien lo que pasa; hay una guerra entre el monstruo y su creador y el pueblo ya no es un mero espectador de la maraña.

El pueblo está encerrado en una lucha de titanes, por un lado Perseo y por el otro Medusa, sabemos quién gana pero… ¿alguien sabe como fue el gobierno de Perseo?

José Luis Senlle.

sábado, 16 de junio de 2012

EL HOMBRE. Parte dos.


Podemos decir que se conocen dos tipos de vidas bien definidas en el ser humano: Una llamada vida activa y la otra es la vida intensa.

No es lo mismo vivir activa que intensamente. Vivir una vida activa es estar pendiente del trabajo, del estudio, de las cosas materiales, no teniendo el tiempo suficiente para dedicarse a otros menesteres como el cuidado de sí mismo.

La vida cotidiana hace que aumentemos nuestro trabajo para poder mantener lo material que teóricamente nos hace felices, no es nada más ni nada menos que una pobre ilusión de lo que lleva la vida. Esta vida, la vida activa, es una vida hacia afuera del hombre, es una lucha del hombre por tener y poseer donde impera la envidia y la competitividad.

La vida intensa es la vida del auto conocimiento, el conocerse a sí mismo; nosce te ipsum como lo decía Sócrates; entonces, ¿Para qué el hombre necesita o pretende conocerse a sí mismo?

El hombre debe conocerse a sí mismo para perfeccionarse, para no quedarse con dudas o para quedarse con la menor cantidad de dudas posibles y acercarse a la verdad, a Dios a la esa deidad que no tiene nombre.

Y si bien es cierto que el todo está en el todo y todo está en todas las cosas; nos referimos al todo dentro de sí, que Dios se encuentra en nosotros. El todo es mental; todo es doble y dual, así como el hombre posee el cuerpo y el alma.

El camino del auto conocimiento es duro, difícil, trabajoso, sinuoso y para ello debe contarse con voluntad, despojo y tiempo. Este camino no se termina nunca y es una elección de vida, vida de sacrificios y trabajos.

La regla que mide el tiempo para el trabajo, ese tiempo utilizado para fines nobles como es el conocimiento de sí mismo, los antiguos sabios lo llamaban “Ocio”.

Cuando se carece de “regla” como reloj y ley, se carece de ocio para negarlo y la negación del ocio se llama “Negocio” entrando fácilmente en la vida activa, sin reglas claras para el “si” ni para los otros sufriendo una enfermedad como es el “stress” como consecuencia del activismo de la vida “PRO” que es la vida hacia afuera.

El carecer de “regla tiempo” como consecuencia del Neg-ocio sostenido a lo largo del tiempo enferma y mata por stress, depresión y la falta de vida “INtroyectiva” hacia adentro.

A tal punto de la discusión se llega a la conclusión que el hombre para ser hombre debe tener en claro que posee dentro suyo algo que se llama “Alma”.

El alma, del latín “anima” se usaba para designar el principio por el cual los seres animados estaban dotados de movimiento; espíritu es el aliento del ánima.

Platón consideraba al alma como la dimensión más importante del ser humano. Hablaba de ella como si estuviese encarcelada en un cuerpo, idea prestada del orfismo. Timeo decía que estaba compuesta de lo idéntico y lo diverso que era “sustancia” que el Demiurgo usó para crear el alma cósmica y los demás astros, creía en dos almas: la pasional que residía en el tórax y la apetitiva que estaba en el abdomen.

Aristóteles la define como psique y forma una unidad sustancial entre materia y forma que son inseparables en los seres vivos, se desprende de su definición la visión dual del hombre, cuerpo y alma. Mientras el cuerpo es la materia corruptible y tangible, el alma es incorrupta e intangible.

Tomás de Aquino plantea una definición aristotélica, antropológica y a su vez, Platónica.

Dejando de lado el pensamiento occidental posterior a éstas definiciones y volviendo al alma como psique o mente es imposible no mencionar a los siete principios Herméticos de la verdad.

Los principios de Mentalismo, Correspondencia, Vibración, Polaridad, Ritmo, Causa y efecto y Generación.

“La mente así como todos los metales y demás elementos, pueden ser transmutados, de estado en estado, de grado en grado, de condición en condición, de polo a polo, de vibración en vibración. La verdadera transmutación es una práctica, un método de arte mental”.

En los actuales momentos en el mundo hay un afán por el saber. Los centros de educación se multiplican. La gente se está dando cuenta que el conocimiento abre nuevas perspectivas, tanto laborales como intelectuales y sociales. Pero es importante anotar que los títulos no bastan para lograr el desarrollo humano. Todos sabemos que la indelicadeza con el tesoro público y la corrupción administrativa no son obras de simples analfabetos. Es más, el “doctor” sin los valores éticos y morales es una amenaza para la sociedad, para la estabilidad de las instituciones republicanas y para la permanencia del género humano sobre la faz de la Tierra. De ahí que las entidades educativas deben empeñarse en formar hombres que no sólo dominen la ciencia, sino que sean modelos de virtudes. En ese sentido, se propone una educación laica, que garantice una verdadera libertad de conciencia, para que la humanidad marche hacia una moral sin dogmas y pueda superar “la minoría de edad”, según la expresión kantiana, iluminada por la intelligenttia surgida del portentoso avance de las ciencias.

Mediante lo expuesto, nos queda claro que el hombre es cuerpo y alma, poniendo el esmero y con medida que el alma es la expresión divina puesto en el seno del ser.

Que el hombre debe ser medido y con metas de crecimiento claras para poder abrirse paso a las sombras de la mediocridad, conocerse a si mismo corresponde conocer el medio y el camino para salir de la oscuridad de la caverna, aquel mito del que habla Platón.

Que carecer del tiempo es permanecer en la ignorancia y vivir profanamente es ser perezoso para sí y con los demás.

Que el hombre virtuoso, trasciende alquímicamente, todo lo que toca, que necesita de los otros para llegar a las metas en común, que admitiendo su intrascendencia física adquiere menos prejuicios y más cualidades, que a cada etapa de crecimiento, se enfrentara con desafíos mayores. El hombre pacientemente modelado, éticamente íntegro cuya visión amorosa se despliega al infinito, entrega generosamente lo que es y sabe al otro, a la sociedad, en definitiva al éter, pues sabe que ya en lo cósmico, todo se replica y multiplica, para su propio bien y el de toda la humanidad.

José Luis Senlle

sábado, 9 de junio de 2012

EL HOMBRE. Parte uno.


"Donde quiera que estén las huellas del Maestro, allí los oídos del que está pronto para recibir sus enseñanzas se abren de par en par".

"Cuando el oído es capaz de oír, entonces vienen los labios que han de llenarlos con sabiduría".

¿Qué es el hombre?

Los seres humanos formamos una especie común y las diferencias físicas que tenemos en los rasgos fisonómicos, color de piel, altura y otras peculiaridades, se deben a las influencias del medio ambiente en el que cada raza tuvo que adaptarse. El hombre se asocia a la naturaleza aprovechando lo que ésta le ofrece. El mundo es un solo país con distintas adaptaciones al medio en que vive.

No interviene el azar cuando se combinan genomas de diferentes individuos en la especie.

Tomamos al hombre como un todo y dentro de ese todo se encuentra la dualidad cuerpo y alma. El nacimiento, desarrollo del espíritu y la evolución cualitativa de la inteligencia humana con sentido humanístico son dos herramientas poderosas que pueden contener y reducir tanto como se quiera el instinto de agresión innato que posee el hombre.

El desarrollo de la inteligencia mostró a los seres humanos la conveniencia de sumar esfuerzos para aumentar el “poder de caza” y la mayor capacidad de recolección de alimentos. El paso del individuo solitario a la integración en hordas fue un verdadero adelanto social, más avanzado aún fue el acuerdo entre hordas que permitió al hombre ser un animal solitario para dar paso al Homo Habilis, Erectus, y finalmente Homo Sapiens.

El hombre fue adquiriendo ventajas competitivas en relación con las demás especies animales, convirtiéndose en la especie dominante.

La evolución cerebral hace que el hombre moderno sea un verdadero injerto entre de un animal, prisionero de sus instintos y una inteligencia que le permite tener conciencia de sus actos y el darse cuenta de su propia existencia. Ello le permite distinguir entre el bien y el mal y dotarlo de una voluntad para adoptar una conducta moral; también lo conduce a sobrellevar verdaderos conflictos con el ciego mandato de los instintos.

La creciente y compleja vida grupal va dando origen a la cultura que se ha elevado en calidad cuando los hombres llegan a crear la sociedad de la ley, cuyo fin es el logro del bien común.

Los hombres no podrían nunca construir una sociedad como la de las abejas o como la de las hormigas porque se lo impediría su inteligencia, que lo hace consciente de su propia existencia creando dos fuerzas antagónicas. Por un lado, sus propios intereses como individuo que lo llevan a rechazar a unirse a sus congéneres. Por otro lado, su capacidad de raciocinio le ha ido mostrando no solo la conveniencia de unirse a los demás por cuestiones materiales, sino también por fuerzas afectivas basadas en la creciente solidaridad que se le ha ido desarrollando en millones de años, su inteligencia le hace comprender que cada avance en lo social y hacia la solidaridad, que cada ventaja competitiva adquirida le daba mayores poderes y alcances; han prevalecido los logros obtenidos gracias a esas ventajas competitivas.

Los obstáculos que se oponen al progreso humanitario del hombre son las pasiones que hacen sufrir a los individuos, quienes anhelan poseer las cosas que desean. Las pasiones se agudizan cuando ven cerca lo deseado y en posesión de otros hombres, así es como se desatan las agresiones, las envidias y los odios que no pueden ser atenuados por las esperanzas de obtenerlas en mayores cantidades si colaboran con los otros hombres, en lugar de envidiarlos u odiarlos y, llegado el caso, agredirlos para despojarlos.

Las pasiones lo impulsan a tratar de ser el más poderoso, el más admirado, el mejor. Eso le da fuerzas para luchar por el poder que dará un sentido trascendental a su vida, porque el hombre a diferencia del animal, tiene conciencia de sí mismo y por lo tanto se mide con los demás. Cree que con el poder total, su vida logrará su sentido pleno y verdadero.

La verdadera historia del hombre es la de la evolución de la inteligencia humana, que si bien puede actuar independientemente de su voluntad, no es ajena a ella. A partir del homo Sapiens Sapiens los seres humanos comienzan a tener pensamientos trascendentes y el proceso culminaría cuando la función cerebral comienza a independizarse de las manos y se convierte en órgano receptor y procesador de información.

El hombre es la sumatoria de animal más conciencia de sí mismo y esa conciencia se transmite de generación en generación, no dejando de ser animal, una animal pensante. Lo espiritual constituye una forma particular y superior de vida que tuvo su origen cuando apareció el pensamiento conceptual, y esto fue posible con el cambio cualitativo de la inteligencia en el hombre, lo cual le permitió no solo saber y aprender cosas sino también darse cuenta que sabía y aprendía. Los hombres cuando comienzan a obrar socialmente constituyen un conjunto supraindividual que resume la esencia del espíritu humano, se produce una obra compuesta por muchos cerebros que actúan en forma conjunta e interdependiente con factores de desarrollo del conocimiento y de la cultura.

La forma de transmisión es más rápida que la genética pues la comunicación entre los hombres y entre las diferentes culturas es instantánea.

Sabiendo que el hombre es un animal inteligente y el instinto es común a todos los animales, se infiere que al hablar del hombre se habla de su inteligencia, de su alma y de su vida.


José Luis Senlle.

PRIMERA PARTE.