jueves, 6 de agosto de 2015

DESDE CUANDO UN ATAQUE ES UN RECONOCIMIENTO.?



El que dice vivir en guerra es porque no sabe darla. Senlle. MD.

Mediante una larga fila de aduladores, aplaudidores de pirañas y colocadores de cara hacia una cámara; se expone mediante cadena nacional, inconstitucional por cierto, ya que veda las fechas de elección; se anuncia un aumento a los jubilados el cual ya estaba dispuesto por “ley” de un 12. 49%, lo cual no les alcanza a los jubilados de comprar sus medicamentos.
En la misma cadena, irrespetuosa y mostrando a todos los ladrones que habitan la casa rosada, vemos la cara de un vicepresidente excitado por alguna que otra sustancia, desplazado por la cara de un señor que no puede tomar la sopa con cuchara; es realzado por una guerrera sin voz, sin volumen y sin espíritu.
Me pregunto… Desde cuando decir la verdad de las investigaciones son declaraciones de guerra?
Las tácticas y estrategias de guerra de un gobierno que la ve muy cerca, son las mismas que una dictadura que, son blanqueadas por una votación que sabemos que serán falseadas.
Esta mandataria que, lo único que ve en su pueblo es odio y guerra; defiende a sus sequitos con extravagancias llenas de estupidez que los mismos recordaran como a Napoleón yendo hacia Waterloo.
Desde cuando un ataque es un premio???... Ruego a los politicos antiguos que me expliquen qué quiso decir.
Ruego por la paz en nuestro país, totalmente pacifico que quiere vivir en libertad de la droga y trata de personal, queremos ser argentinos donde un ataque sea un delito.
Queremos un país que no quiere problemas con nadie, que todo funcione como corresponde.
Que Aerolíneas Argentinas de ganancias y no sacarle dinero a los trabajadores para financiar a un gobierno que quiere guerra civil.
Que los jubilados tengan una obra social como fue… la mejor de América.
Que los hospitales funciones como merece nuestra gente y que los patoteros implicados con pactos non santos con los extranjeros se atiendan en los mismos.
Que la educación sea como la quiso y la vió Don Domingo Faustino Sarmiento.
El ataque nunca es un premio y si se sienten atacados, no pediremos disculpas, pediremos justicia.
Nosotros no estamos en guerra, el pueblo es pacífico y no quiere que se los trate como atacantes.
Somos más pero, queremos un cambio.  

José Luis Senlle
www.jsenlle.blogspot.com.ar

lunes, 27 de julio de 2015

ENTRE ANGELES Y DEMONIOS



El que conoció a un psicópata refiere “viví un infierno” pero solo unos pocos se animan a describirlo por dentro. Senlle MD.

Cuando un diablo ataca, ya sea incubo o súcubo, lo hace a los desprevenidos angeles, de corazón ingenuo, con la moral alta y el cerebro en otra cosa.
Cuando el cerebro está cercenado o mutilado por medicinas o drogas, es circunstancia propicia para atacar.
La cantidad de Incubos es la misma que los súcubos, de manera que no creo en ninguna estadística al respecto. Claro está que cuando me refiero al diablo y sus formas, me refiero a los psicópatas mundanos.
Los Incubos son peligrosos por su pene, ya sea, Pene, Plata, Portátil, Poder, Auto, Casa, Joyas; ellos son personas que ostentan maliciosamente su poder; generalmente jefes o gobernantes.
Se alían a los súcubos que poseen los mismos intereses.
Los súcubos son más peligrosos que los Incubos porque es la sumatoria de características con la particularidad de ser sexuales; toman el sexo no como placer de procreación sino como negocio, para dominar al normal o negociar con el  incubo.
Los Incubos (hombres) y los súcubos (mujeres) son todos psicópatas que deberían estar en el DSM, el problema es que la cúpula de la psiquiatría mundial se comporta psicopáticamente.
Un súcubo cuando aclara que es madre, lo que está diciendo, lisa y llanamente es que es un súcubo; mujer psicópata que pretende manejar a sus hijos y a su marido, que generalmente un normal que no sabe del tema, ya sea por ignorancia, por trabajo o dominación mental.
Un súcubo no trabaja, hace trabajar; citado algunos autores los psicópatas hacen hacer. Manejan a la distancia y tiene el control de todo, lo saben todo aunque no entienden nada. No tienen la menor idea de  para qué están en el mundo.
Debo aclarar que hablo de psicópatas, por  si no se entiende y, no comparo la demonología con la psiquiatría, acá no hay que rezar ni encender velas, solo hay que darse cuenta de las libertades y el libre albedrio de los normales.
Cuando un súcubo es jefe es más déspota y antidemocrática que un incubo, son despiadados y más querellantes ante la justicia; hasta pueden estudiar el derecho para sentirse más seguras de lo que dicen, son tajantes y su arma habitual es un cuchillo o una lengua filosa, hiriente en lo más íntimo de sus normales.
Cuando un incubo es jefe es déspota y antidemocrático pero actúan indirectamente utilizando esclavos, rehenes o subnormales, no son tan querellantes y su arma habitual es el mazo, martillo o puño de mano; éste es el hombre pegador ya sea, por violento o impotente. Generalmente está solo y piensa, le cuesta dormir o se droga con algún estimulante.
Atraen la atención de maneras similares pero propias.
Los masculinos lo hacen con extravagancia y dando impresión que dentro poseen un dejo de tristeza.
Los femeninos, lo hacen por medio de la disputa hacia su persona, y su aparente mirada melancólica.
Hablo de tristeza y melancolía como atractivo, puesto que a todo ser humano nos interesa el bienestar del otro, y de ésta manera se van posicionando como centro de atención.
Estos dos estados de ánimo son complejos, porque es una suma de uno o más ánimos, despertando interés de un mayor o mejor conocimiento.
Es muy difícil que un normal llegue al poder porque, al normal le interesa competir por su puesto de manera legítima sea, por empatía o sabiduría. Se lleva muy mal con los diablos de ambos sexos.
Los diablos generalmente ganan las partidas por las trampas que ponen; cuando el diablo mete la cola, el ángel sale volando.
Para los Incubos y los súcubos, los normales son inadaptados al sistema y cuando un normal se adapta al sistema, sucumbe en la mediocridad del propio sistema.
Utilizan frases comunes de la mediocridad: “Para que vamos a mejorar si ganamos igual”, “El que sabe, sabe; o sino es jefe”, o la famosa frase de Friedrich Nietzsche  “Lo que no me mata, me fortalece”.
Los diablos, tanto hembras como machos viven en permanente estado de guerra y ansiedad con el mundo e incluso con el universo, son capaces de discutir con su dios, por qué son tan genios. Luchan por sus derechos con las garras o “la cuchilla de Rambo” entre los dientes, camuflándose como buenos y justicieros.
Incubos y los súcubos cuando se encuentran en el poder se matan por más, fingiendo que son amigos para la sociedad normal, ignorante de todo éste tipo de conocimientos y que cree que compiten limpiamente.
No he visto, hasta el momento, un gobernante normal, los normales quedan rezagados a la injusticia de estos psicópatas, demonios o diablos.

José Luis Senlle
Jsenlle.blogspot.com

sábado, 25 de julio de 2015

MUTILADORES CEREBRALES



No hay criminal más grande que el que te mutila la mente, te lo digo porque a mí mutilaron el cuerpo pero no pudieron con mi alma.

Cuando uno comienza a brillar, a los malos se le notan las sombras porque entre tinieblas todos somos iguales.

Los psicópatas los veo todos los días, a la vuelta de la esquina, en el supermercado y en la computadora, lo importante es alejarse de ellos, contagian, porque son diablos y los mismos tienen malos pensamientos.
Actualmente todos y sin excepción, los que ostentan poder son especies de íncubos o súcubos que fueron puestos en el mundo para no entender a la sociedad y menos a la sociedad globalizada. No entienden nada, ni miran nada; solo miran su ombligo, no tienen ojos para ver otras cosas, ni las bellezas de la vida.
Los psicópatas, a los que llamo diablos cotidianos, suelen tener ággelos que del griego se traduce como mensajeros; son personas de bajo espectro caracterizados por ser esclavos o rehenes de los mismos; esto es lo que se llama habitualmente “la corte infernal”.
Los ángeles cotidianos, llamados normales son hombres y mujeres que estudian viendo la historia y proyectando el futuro, gracias a la necesidad de dejar en evidencia la conducta repetitiva de los Psicópatas-Diablos; son los que ponen razonamiento al conocimiento, doy ejemplos: Alexander Fleming, Albert Einstein, Steve Jobs, Karl Popper, Michio Kaku y obviamente Keppler y Copernico, entre otros.
El ponerle razonamiento a Dios es demostrar que Dios existe.
Los demonios son, sin embargo, tan angeles como sus hermanos celestes. Los mensajeros de oficio y vocación son una tropa férreamente disciplinada bajo los angeles y los demonios.
Los psicópatas tienen un ejército con disciplina sutil y a cuanto mayor disciplina mayor es su jerarquía.
La mente de un psicópata cotidiano es entendible por su lógica y actos;  lo que pretenden es permanecer en  poder, en lo alto o en la cabeza del normal, destruyen.
Los luchadores del bien son los que suelen dedicarse a ordenar la cabeza y sentimientos de los mensajeros angelicales que sufren por los manejos psicopáticos o sociopaticos, hoy los llamamos psiquiatras que no pueden hacer otra cosa que estudiar la química cerebral y actuar en consecuencia, recetando inhibidores de la receptación de serotonina o dar derivados de la receptación de la dopamina. El lector puede estudiar y ahondar lo que digo en los pobres libros de psiquiatría, ya desactualizados;  es por eso que existen tantos DSM como pacientes y profesionales.
Hay algunas víctimas de los Diablos que tratan de disminuir daños con medicaciones antiguas, hoy ya no aceptadas como el alcohol o las drogas que lo sacan de la realidad por cansancio,  convirtiéndolos en otro tipo de esclavos, esclavos químicos.
Los íncubos y los súcubos socaban la mente del normal especialmente de noche, entre las tres y cuatro de la mañana y los normales no pueden dormir por falta de coraje y enfrentarse a éstos demonios.
Para luchar internamente contra éstos psicópatas se necesitan tácticas y estrategias que no puede hacerlo uno solo sino con ayuda psicológica, se deben cumplir a rajatabla, porque éstos personajes de alta calaña son demasiado fuertes ya que concurren con su ejército de débiles estúpidos, pobres espectros, almas perdidas en vida.
Escapar ya no sirve, hay que enfrentarse y armados con estrategias consistentes.
En otro capítulo explico el cómo y por qué hacerlo.

José Luis Senlle
Jsenlle.blogspot.com.ar

viernes, 24 de julio de 2015

DE PSICÓPATAS Y DIABLOS.



“Si fuésemos razonables, Hermógenes, confesaríamos que nada sabemos de los dioses, ni de sus personas ni de sus nombres” Platón-Cratilo.

El que leyera éstas líneas y supiera de lo que hablo, entendería que no hay diferencias entre los psicópatas y los diablos. Senlle.

La astucia del que lee es tomar conciencia, mirarse hacia adentro y sacarlo hacia afuera; mostrarlo y enseñarlo. Senlle.

NOSCE TE IPSUM. Oráculo de Delfos.



La pregunta es la siguiente… Se puede entender a un psicópata? …
La pregunta es SI, si se es empático,  entender a un psicópata no es fácil, porque ellos no lo son y hay que realizar un esfuerzo sobrehumano de distancia emocional que me lleva a los libros.
Los psicópatas, desde mi punto de vista, no son seres humanos y, toman distintas formas de disfrazarse de humanos.
Son diablos que recorren el mundo y cambian de forma, de modo, de espacio- tiempo y lugar, estén donde estén. “La mayor astucia del diablo es la de convencernos que no existe”; lo dijo Baudelaire, en su libro Letanías a satán.
No hay dudas que el psicópata, o diablo como lo llamo subsiste bajo ciertas metamorfosis en las obsesiones apocalípticas, sexuales o mágicas del hombre.
La palabra Satán viene del hebreo y significa adversario, enemigo. Para poder entender al enemigo, uno debe tener voluntad y empatía, entender la ambigüedad de su apariencia y conducta. Los psicópatas tienen centenares de formas y reencarnaciones.
“Cuando no hablamos acerca de Dios o en el nombre de Dios, es porque el Diablo nos habla y  nos escucha en silencio formidable” León Bloy.
Cuando se habla del Diablo (en éstos casos Psicópatas) suele identificárselo como anormal y devastador para un determinado número de personas. Los Diablos privan del ser al humano. Son fantasmas disfrazados de humanos que en sus fluidos llevan la sangre animal, sin conciencia pero con proyecciones psicológicas de deseos, pensamientos y odios.
Generalmente recurren a los pensamientos mágicos y buscan ayuda de otros Diablos o psicópatas o brujos para cumplir su cometido, tienen un pensamiento primitivo, nada racional y buscan un flanco débil para obtener lo que desean; imposibles de hacer negocios profundos buscando solamente su simple beneficio.
Generalmente son monos descamándose en bellas y amables personas, el normal no puede captar o ver lo que sucede; hasta que sale de éste maldito circuito.
Tienen la necesidad imperiosa de aparecerse en la tranquilidad en un ser iluminado; lo que la biblia llama “tentación”, esto se llama “parusía” o aparición. Se visten de santos y cuando el ingenuo baja la guardia, ellos atacan con mucha fuerza, prácticamente matando a su enemigo.
Son artífices de demiurgos, que mienten, actúan, florecen y se muestran en el verbo.
Pueden aparecer en forma de hombre o mujer, según lo que quieran atacar o medirse, suelen usar lo que hoy se llama magia negra, usan círculos o copias absurdas del divino Tetragrammaton, velas en sus oraciones utilizando el fuego para que el caos reine en el otro (enemigo).
Siempre son inocentes, recayendo la culpa en el mundo que los rodea, son buenos, amables, excitantes con mirada parecido a lo limpio pero es totalmente oscuras por dentro si, por muy dentro.
Los psicópatas-diablos viven en lo profundo de su ser que los llamo Hibernáculum y en su hogar son hermafroditas preparados para subir y mostrarse como quieran, según requieran.
No piensan en nadie, nada más que en ellos mismo. Nunca encubren sus partes sexuales que son grandes, sinuosas y escamosas; pueden ser Incubos y Súcubos, los primeros son masculinos cuyo pene es un formidable tridente que exige la práctica de la fellatio a sus servidoras.
Los súcubos aparecen en forma de mujer, la palabra viene del latín succŭbus, de succubare, «reposar debajo» ;  tienen una hermosa vulva protectora con bellos olores y flores muy parecido a lo que se describe en los jardines del Edén.
El primer psicópata surgió en ése jardín imponiendo voluntad a una mujer inocente, cuando ella escuchó sus virtudes, se convierte en súcubo contagiando a su hombre en incubo; los dos fueron expulsados del famoso jardín.
Fuera ya del palacio, el hombre se encuentra con otra súcubo llamada Lilith, llenando el mundo de psicópatas.
Los psicópatas son extremadamente sexuales, no les importa el amor, solo les importa existir para reinar en el bajo mundo. Tomando a sus habitantes como cosas servidoras, hasta pueden comerciar con sexo para dejar impronta.
Los psicópatas son demonios escondidos en el mundo, tomando al mundo como cosa para cumplir sus propósitos .
Lo mejor que pueden hacer los normales es alejarse cuando se den cuenta, lo más rápidamente posible, dejar todo he irse y desde la distancia… aprender, mirar, observar, poner un ojo, buscarse y reconocerse a sí mismo luego el daño producido (evaluar daños), comenzar nuevamente una vida normal y reírse de las tentaciones de los malignos.

José Luis Senlle
Jsenlle.blogspot.com.ar