
La verdad es un sistema formal; con el sistema formal se pueden realizar teoremas, por ejemplo: uno más uno es dos, o sea que un sistema formal se fundamenta en la realidad y parece reproducirla a la perfección ya que los teoremas son isomorfos (de la misma forma), respecto a las verdades concernientes a esa parte de la realidad. Aclaro que un sistema formal está compuesto de símbolos matemáticos concatenados que pueden ser manipulados mediante reglas específicas. El sistema formal es capaz de representar ciertos aspectos de la realidad.
No obstante, la realidad y los sistemas formales son independientes entre sí y nadie necesita recordar que hay un isomorfismo entre ambos.
¿Es posible transformar la realidad en un sistema formal?
La realidad es un sistema formal complicado en un espacio tridimensional. Las partículas elementales esparcidas en el espacio tienen reglas tipográficas llamadas leyes físicas, las cuales nos dicen cómo proceder dada determinadas posiciones en un momento determinado.
Por lo tanto, los teoremas son configuraciones que asumen las partículas en determinada historia del universo. Según las reglas del sistema formal, un teorema es perfecto si el isomorfismo es perfecto.
Ahora bien, si las reglas de un sistema formal no son isomorfas y como consecuencia el teorema es imperfecto, se observa una postura de la realidad imperfecta. Cuando no se comprende y se aplica una regla no isomorfa, el teorema es incorrecto y la realidad es distorsionada.
Los orígenes de un falso enunciado, son como consecuencia de una aplicación errónea de un sistema formal persistente. Se entra de ésta manera en un espiral descendente por el falso enunciado.
José Luis Senlle
www.jsenlle.blogspot.com