El que no sabe
lo que busca, no entiende lo que encuentra. (Claude Bernard)
La profesión
médica tiene compromisos con los pacientes y con la sociedad.
Un médico tiene
sus manos para curar y la actitud
para amar a su gente.
Un médico no es
boxeador ni patotero, un médico no pega
pero si discute por los valores y la moral de la sociedad.
Soy un profesional
comprometido con la sociedad, con la vida y me identifico con ella.
El día jueves 18
de Abril alrededor de las 20: 30 hs, acudí a la Plaza de Mayo, con ropa de trabajo,
mi ambo blanco. Pacíficamente, como muchos argentinos que no estamos de acuerdo
con algunas políticas que se están llevando a cabo en nuestra Argentina, en la
que día a día muchos de nosotros trabajamos desde nuestros espacios para engrandecerla.
La cobertura mediática
en este tipo de concentraciones y sus líneas editoriales no son una novedad que
deba explicitarse.
Es lógico que
cada cual desempeña sus labores al igual que yo en la guardia del hospital en
que me toque.
Los individuos
de la sociedad civil somos ingenuos de este tipo de manejos hasta que nos toca
pasar por este tipo de acusaciones.
No soy un golpeador,
lo reitero, porque la claridad de mis
palabras deben contener lo que los medios no quisieron por alguna razón
comunicar.
El episodio se
desarrolla en la Plaza de Mayo, uno de los epicentros de la marcha.
Una cámara sin
ningún tipo de identificación, un camarógrafo y una trabajadora con micrófono
en mano también sin identificación
visible desde el lugar en que yo me encontraba manifestando como muchos otros.
Me paro detrás
de ellos y escucho que la periodista no dice al aire lo que sucede en realidad,
claramente cuando grito que están mintiendo pido que no filmen si van a
desvirtuar lo que sucede.
Me es negada la
cámara y el micrófono, característica de la agresión de los medios hacia los
manifestantes. Por eso es que la pregunta sería: ¿ Que realidad quieren
mostrar? ¿ Que quieren que pensemos? ¿ Como los medios construyen la realidad?
¿ Que hace un médico que se dedica desde hace años a salvar vidas y que no
tiene por qué entender la dinámica de la arquitectura mediática?
En ese momento persisten
en sus entrevistas armadas, inexplicablemente parece que es una crónica de una anunciación,
pasara lo que pasara, de todos modos, comunicarían que este tipo de
convocatorias tienen un tinte absolutamente negativo.
Trato que la
cámara no me enfoque, rotando el objetivo a mano abierta. Una hombre desconocido y sin identificación,
me toma del ambo y me tira para atrás, trato de soltarme y mientras ocurre eso
digo: “Mentirosos, pregúntenle a la gente que es lo que pretenden de la plaza”
Luego acompañado
por un grupo de manifestantes que me ayudaron a subir, trepé la reja que se
encuentra “protegiendo” la casa de
gobierno de éstas pacíficas y democráticas marchas.
Para mi sorpresa
y la de varios, las rejas, están pegadas con cemento de hormigón al piso.
La policía uniformada
actuó protegiendo a los que allí estábamos, para que no me cayera desde esa altura.
Charlé con ellos y le dije al subcomisario a cargo que no pretendía hacer
desmanes, solo charlar con la gente desde una altura prudencial, ante mi
sorpresa descubrí una marea humana desorganizada, individualista, temerosa del
de al lado, y frente a otro que se sale de la columna, opta por denostarme catalogándome
de infiltrado. Al rato me bajé porque la gente no escuchaba, por los ruidos de
las cacerolas.
Nadie me detuvo,
si me actitud hubiese sido de agresión lo lógico era que me llevaran detenido a
la comisaria, pero eso no sucedió, entonces debo inferir que no existió delito
alguno.
Hablé, mientras
me retiraba de la Plaza con la gente del “porqué” de la cacerola, con tanto
ruido no nos podemos escuchar… hablemos y organicémonos, formemos y
construyamos con ideas superadoras.Me senté en el piso y hablé con un Sr que me
dijo: “Dr. No se preocupe que todo ésto es una forma de descarga para los
indignados”.
Al rato comienza
a sonar mi celular, amigos me comentan que
aparezco en canales de TV y en las redes sociales con denostaciones
varias, diciendo entre otras, que soy un golpeador de mujeres.
Es el derecho de
todo ser humano frente a un poder tan hegemónico tener el derecho a réplica frente a los medios que
mintieron acerca de lo sucedido y explicar mi cuota de verdad.
Soy un hombre
pensante, pacífico y de acción queriendo ayudar a nuestro país mediante hechos
concretos, con votos y sin cacerolas.
El espacio se
puede recuperar, el tiempo, jamás. (Napoleón Bonaparte).
José Luis
Senlle.
www.jsenlle.blogspot.com.ar